domingo, 14 de noviembre de 2010

UN ACERCAMIENTO A LAS INTERPRETACIONES DEL JESÚS HISTÓRICO

La metodología que se ha seguido para la investigación del Jesús de la historia el cual se ha mostrado como un mesías del pueblo judío, presupone la interacción de tres niveles distintos, los cuales son: el macrocósmico, basado en la antropología intercultural e intertemporal; el mesocósmico, en el que se utiliza la historia helenística o greco-romana; y el microcósmico, en el que se emplea la literatura que recoge los relatos, las anécdotas y las interpretaciones respecto a la figura de Jesús. Vid. CROSSAN, John Dominic: El Jesús de la historia. Vida de un campesino Mediterráneo judío. Critica, Barcelona, 2007, p.25.

La investigación histórico-crítica de la figura de Jesús comenzó con el redescubrimiento de la mesianidad y el cuestionamiento de la misma, ya que los estudios que se han hecho revelan la figura de Jesús como el mesías judío, un futuro rey nacional que liberaría a Israel.
En los evangelios de Mateo, Marcos y Juan se habla de la vida de Jesús como un campesino Mediterráneo de la religión judía del primer siglo. Respecto a esta interpretación, la tradición en torno a la vida de Jesús contiene tres estratos:
· La conservación en el que se recoge el núcleo esencial de sus palabras y hechos
· El desarrollo en el que los datos se aplican a nuevas situaciones, problemas inéditos y
circunstancias imprevistas.
· La creación en la que se escribes nuevas historias y sentencias que se van modificando
de acuerdo al propio proceso de creación.
Bultman convirtió el mito gnóstico del hombre originario en la historia de Jesús “asociándolo a una persona histórica singular que fue crucificada y entendiendo la relación entre Jesús y los fieles como una relación de fe”. Gerd Theissen, Annette Merz: El Jesús histórico, Manual Ediciones Sigueme, Salamanca, 2000, p. 566. Respecto a esta interpretación, el Jesús que se devela es un personaje mesiánico, salvador de un pueblo cuyos movimientos son realizados desde un plano de fe.

Dussel señala que Jesucristo asume una totalidad de la condición humana en su limitación, finitud, sufrimiento y muerte, dando así un sentido a la corporalidad, percibiéndose como mediación de salvación. Cfr. DUSSEL, Enrique: El dualismo en la antropología de la cristiandad. Desde el origen del Cristianismo hasta antes de la conquista de América. Argentina, p.47.

Desde el sentido señalado anteriormente, Jesucristo vence a la muerte con su muerte, pero lo experimenta en su radical anonadamiento, siendo visto como un sacrificio espiritual, a lo que comúnmente llamamos la Pasión de Cristo, desde un sentido profundo y dramático.
Por otro lado, Jesús es interpretado como maestro de sabiduría, hijo del hombre y como juez escatológico. Es redentor gnóstico en las teorías histórico-religiosas, es hijo de Dios desde la expectativa mesiánica del Judaísmo, es hijo del hombre por ser semejante a nosotros en cuanto a seres humanos, es mesías por las esperanzas escatológicas de salvación y se determina como Kyrios, de acuerdo con la transferencia a Jesús del predicado de Dios en el antiguo testamento. Cfr. Gerd Theissen, Op. cit. p. 568.
El nuevo testamento se conforma por una serie de interpretaciones teológicas que centran la figura de Jesús en el contexto del Judaísmo. Algo que me llama la atención respecto a las lecturas que he realizado del nuevo testamento, es que nunca se encuentra en él una referencia al cuerpo como origen del mal, si no una totalidad humana que ha sido expulsada de su situación como era pensado el primer hombre.

Trueba Galván Lizbeth

1 comentario:

atopías dijo...

Buenas fuentes, quizá la de Dusel sea polémica en cuanto a su interpretación pero es interesante.

El problema lo veo en el espíritu monográfico, por qué no manejar alguna hipótesis que se preste a la argumentación filosófica?

por cierto, apenas vi esta novedad editorial de la Oxford University Press: Who Chose the Gospels? Probing the Great Gospel Conspiracy

bueno, cualqiuer duda puedes abordarme en clase